De las dos o tres opciones en esta cuadra, esta tasca tiene el ambiente más agradable, de los que invita a dejar atrás el ajetreo de la calle y el trabajo, y a tomarse una cerveza bien fría y probar una comida española sencilla pero gustosa. Se disfruta de un momento tranquilo, conversando o viendo un juego de futbol, con una buena paella o cocido gallego.