Un lugar que no ha cambiado, típica tasca española en donde la especialidad (Paella) es sencillamente deliciosa. El ambiente es agradable, con música en vivo. La atención es atenta y buena. Aspectos negativos: no ofrecen pan (esencial para acompañar una paella) y la carta y/o selección de vinos no es variada. Sin embargo, lo recomiendo por la buena calidad de la comida, las porciones son de gran tamaño.