Tenía tiempo queriendo conocer este lugar. Y debo decir que me encanto! La atención es excelente, un ambiente tranquilo con un buen fondo musical. Lo único es que ya no cuentan con barista o nos informaron que ya no hacían moca, ni bombón...sin embargo probamos su tartaleta de mantequilla de maní y es del cielo!! Su torta de chocolate no está mal.