Almorcé en el Dena Ona y me monté en la máquina del tiempo, un icono de la Caracas de ayer en pleno centro financiero de la ciudad, la comida no sorprende, la misma sazón casera de hace más de 25 años, el mobiliario igual, el mismo ambiente, acá nada a cambiado, supongo que para el que desee un Dejavu debe visitar este lugar, los precios acordes a la zona más no al lugar, admito que fue agradable comer de nuevo allà luego de tantos años, trae gratos recuerdos.
Platos recomendados
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Precio por persona de: Entrada + Plato principal + bebida SIN ALCOHOL
Precio = Entrada + PLato principal + Bebida
Este restaurant es de los sitios que te recuerdan gratos momentos. Tanto la atención como la comida sigue siendo la misma, por lo que los sentidos olfativos y gustativos te llevan a rememorar.
Debo felicitarles pues el lugar se mantiene, el servicio es tremendo te hacen sentir en casa, ambiente familiar bien agradable, y la comida muy rica! espero sigan asà y que en mis próximas visitas tenga mas y mejores cosas que comentar!
Le di dos oportunidades diferentes y con bastante tiempo entre si. NADA QUE VER. la última ves estuvo tan mala que solo cancele las bebidas. No pierda su tiempo ni dinero aquÃ.
Este no es un sitio rebuscado, es un local antiguo, pero fiel a sus orÃgenes, de una Caracas olvidada, la comida es casera y no rebuscada, el servicio es especial, te sientes en familia y en casa.
Hoy fui con mi amiga Laura, creÃamos que la comida iba a ser un desastre, que equivocados estábamos, de verdad que muchas personas dejan comentarios absurdos basados en interpretaciones banales. La comida es de primera, abundante y casera, la atención es de primera, personal y eficiente, el ambiente es el de siempre, esta casa tiene mas de 70 años y la decoración es acorde a su tiempo, no la cambien, hay sitios donde uno va y parecen de revistas o consultorios dentales, este sitio es casero, una casa antigua con una decoración antigua, pero con todo lo que necesitas para pasar un buen dÃa. Gracias Dena Ona
Excelente lugar y atención, la comida como la de casa, la cerveza frÃa y en abundancia, Dena Ona me sorprendió.
El carpaccio de Lomito es unico en este sitio, el comensal anterior me estimulo a comprar las otras, son enormes y deliciosas, se los recomiendo.
Este no es un sitio rebuscado, es un local antiguo, pero fiel a sus orÃgenes, de una Caracas olvidada, la comida es casera y no rebuscada, el servicio es especial, te sientes en familia y en casa.
Este restaurant es de los sitios que te recuerdan gratos momentos. Tanto la atención como la comida sigue siendo la misma, por lo que los sentidos olfativos y gustativos te llevan a rememorar.
Hoy fui con mi amiga Laura, creÃamos que la comida iba a ser un desastre, que equivocados estábamos, de verdad que muchas personas dejan comentarios absurdos basados en interpretaciones banales. La comida es de primera, abundante y casera, la atención es de primera, personal y eficiente, el ambiente es el de siempre, esta casa tiene mas de 70 años y la decoración es acorde a su tiempo, no la cambien, hay sitios donde uno va y parecen de revistas o consultorios dentales, este sitio es casero, una casa antigua con una decoración antigua, pero con todo lo que necesitas para pasar un buen dÃa. Gracias Dena Ona
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