Es una de mis opciones económicas y de buena comida que más uso. El pasticho es delicioso y muy accesible en precio, las pizzas divinas y para dos personas, recomiendo la Kapricho que tiene de todo y no escatiman en queso. Muchos dulces para escoger (casi todos para compartir en pareja), recomiendo el roll con chocolate, es inmenso, profiterol, las tortas en general, la quesadilla clásica, pastei de nata (portugués) es delicioso. Las pizzas por porción llenan full y son muy baratas ($1). Lo terrible terrible es estacionar, casi que es mejor ir al Tolón y luego cruzar la calle. también es desagradable que hay gente que fuma en la parte de afuera y se mete el humo al interior y no les dicen nada. La atención me parece muy buena, los mesoneros te complacen, te llevan agua, hielo, lo que pida. La ensalada de la casa, a diferencia de la que piden todos (César con pollo), es lo máximo, muy original, grande y precio decente. Otro detalle es que hay que hacer una cola para comprar que a veces puede ser muy larga, pudiesen dar la opción de servir a la carta y que cobren el 10%, pero al dueño no le gusta así. Sin embargo, lo recomiendo mucho. Mejor opción que los food trucks que no están nada económicos y comes de pie en la calle o donde estén.