Un pastelito de ricota de masa de hojaldre y un marrón grande. Si tienes paciencia para que te atiendan, te sientas en la barra a comer y a disfrutar. Hay muchas cosas que probar. Y todas se ven deliciosas.
El piso de arriba es lo mejor, es más tranquilo y acojedor. Me dijeron que las berenjenas tenía que probarlas. Son mundiales, las recomiendo. La comida en general es delociosa, comida china mandarín, los tallarines deliciosos, los camarones crunch también, la sazón es excelente. Y si sólo quieres tomarte unas birras y compartir estás en el lugar indicado. Igual te va a dar ganas de comer si ves lo que los demás están pidiendo.
Impecable. La atención es excelente, apropiada y corresponde con el lugar. El ambiente es elegante, aunque un poco antiguo, sin embargo muy agradable. Los escargots de entremes estaban muy ricos y la crêpe de ajo porro y pez espada deliciosa. En general la comida es muy buena. Probamos la lengua a la pizzaiola con vegetales y el filet de róbalo con almendras. La torta de queso con salsa de moras, delicosa. En general una gran experiencia.
Es chévere, para una tarde de café y tertulia, quizás una torta o un pastel de hojaldre, no les recomiendo la marquesa. El macchiato, el mejor de Caracas.
A pesar de las circunstancias, el servicio es excelente, los mesoneros, aunque no son chinos, cosa que es rara, son excelentes. La comida, deliciosa, creo que me he comido uno de los mejores Wanton Mein de mi vida, aquí, aunque no aparece en el menú, al igual que el plato de cebollín chino que estaba delicioso. Y no puedo dejar pasar la salsa de ciruela para acompañar las lumpias, sublime, no hay otro restaurante chino en Caracas que tenga esa salsa. No entiendo por qué no viene más gente a este lugar.
La comida es muy buena, no tardamos demasiado en sentarnos a pesar de lo lleno que estaba el lugar. El servicio es acorde al lugar, son diligentes y conocen el menú. Los postres no eran nada apetitosos y el carrito en el que los llevan está bastante descuidado, los postres no están cubiertos. El ambiente es agradable, y sobretodo ver mientras cocinan las carnes.
A pesar de que esperamos como gente decente nuestra mesa el anfitrión permitió que unos desapdaptados que nos pasaron por en frente se colearan y los sentaron antes que a nosotros, luego de hacer el respectivo reclamo nos dieron una mesa y todo mejoró un poco, tuvimos que pedir que nos sirvieran agua pero de resto el servicio del mesonero que nos atendió estuvo bien. En cuanto a la comida, ni una sola queja, la ensalada tibia tentación (aunque en vez de manzana vino con piña) estaba deliciosa y los tortellonis en salsa Balconata, el Cartocho de Lomito y el tiramisú estuvieron deliciosos también. El ambiente era agradable porque a pesar de que había bastante gente el servicio era atento y la comida llegó de forma expedita. Los puntos lo pierden los anfitriones, y el vallet parking que no son muy educados.
Siempre es bueno, a pesar de la crisis han mantenido la cantidad, calidad y los sabores y eso se aprecia muchísimo! Los muchachos que te atienden son atentos. Y el Airan es muy sabroso.
El lugar es muy agradable, el ambiente y la decoración muy interesante. Cuando entramos nadie nos recibió, y luego apareció la hostess que nunca dejó de ver el celular, terrible. No había cerveza! El lomito vulcano estaba muy bien preparado pero la carne no era de la mejor calidad. El risotto de frutos del mar, aprobado. Y el fondant también. En general fue muy agradable la velada. Y quedamos contentos.
No hay dónde estacionar, la comida es absurdamente cara para la calidad, el servicio está bien, pero la comida no es muy buena, no pedimos postre porque seguramente era carísimo y no iba a ser tan bueno, menos mal que teníamos un cupón.
Dulces Caprichos
Un pastelito de ricota de masa de hojaldre y un marrón grande. Si tienes paciencia para que te atiendan, te sientas en la barra a comer y a disfrutar. Hay muchas cosas que probar. Y todas se ven deliciosas.
Excelente
El piso de arriba es lo mejor, es más tranquilo y acojedor. Me dijeron que las berenjenas tenía que probarlas. Son mundiales, las recomiendo. La comida en general es delociosa, comida china mandarín, los tallarines deliciosos, los camarones crunch también, la sazón es excelente. Y si sólo quieres tomarte unas birras y compartir estás en el lugar indicado. Igual te va a dar ganas de comer si ves lo que los demás están pidiendo.
Lasserre
Impecable. La atención es excelente, apropiada y corresponde con el lugar. El ambiente es elegante, aunque un poco antiguo, sin embargo muy agradable. Los escargots de entremes estaban muy ricos y la crêpe de ajo porro y pez espada deliciosa. En general la comida es muy buena. Probamos la lengua a la pizzaiola con vegetales y el filet de róbalo con almendras. La torta de queso con salsa de moras, delicosa. En general una gran experiencia.
Provenzal
Es chévere, para una tarde de café y tertulia, quizás una torta o un pastel de hojaldre, no les recomiendo la marquesa. El macchiato, el mejor de Caracas.
Sieng Sieng
A pesar de las circunstancias, el servicio es excelente, los mesoneros, aunque no son chinos, cosa que es rara, son excelentes. La comida, deliciosa, creo que me he comido uno de los mejores Wanton Mein de mi vida, aquí, aunque no aparece en el menú, al igual que el plato de cebollín chino que estaba delicioso. Y no puedo dejar pasar la salsa de ciruela para acompañar las lumpias, sublime, no hay otro restaurante chino en Caracas que tenga esa salsa. No entiendo por qué no viene más gente a este lugar.
El Tinajero de Los Helechos
La comida es muy buena, no tardamos demasiado en sentarnos a pesar de lo lleno que estaba el lugar. El servicio es acorde al lugar, son diligentes y conocen el menú. Los postres no eran nada apetitosos y el carrito en el que los llevan está bastante descuidado, los postres no están cubiertos. El ambiente es agradable, y sobretodo ver mientras cocinan las carnes.
Balconata Romana
A pesar de que esperamos como gente decente nuestra mesa el anfitrión permitió que unos desapdaptados que nos pasaron por en frente se colearan y los sentaron antes que a nosotros, luego de hacer el respectivo reclamo nos dieron una mesa y todo mejoró un poco, tuvimos que pedir que nos sirvieran agua pero de resto el servicio del mesonero que nos atendió estuvo bien. En cuanto a la comida, ni una sola queja, la ensalada tibia tentación (aunque en vez de manzana vino con piña) estaba deliciosa y los tortellonis en salsa Balconata, el Cartocho de Lomito y el tiramisú estuvieron deliciosos también. El ambiente era agradable porque a pesar de que había bastante gente el servicio era atento y la comida llegó de forma expedita. Los puntos lo pierden los anfitriones, y el vallet parking que no son muy educados.
Pincho Pan
Siempre es bueno, a pesar de la crisis han mantenido la cantidad, calidad y los sabores y eso se aprecia muchísimo! Los muchachos que te atienden son atentos. Y el Airan es muy sabroso.
Favola
El lugar es muy agradable, el ambiente y la decoración muy interesante. Cuando entramos nadie nos recibió, y luego apareció la hostess que nunca dejó de ver el celular, terrible. No había cerveza! El lomito vulcano estaba muy bien preparado pero la carne no era de la mejor calidad. El risotto de frutos del mar, aprobado. Y el fondant también. En general fue muy agradable la velada. Y quedamos contentos.
La Romanissima (C. C. Tolon)
No hay dónde estacionar, la comida es absurdamente cara para la calidad, el servicio está bien, pero la comida no es muy buena, no pedimos postre porque seguramente era carísimo y no iba a ser tan bueno, menos mal que teníamos un cupón.