En esta oportunidad, probé el menú ejecutivo, el cual se presenta como una opción inusual para una pizzería de este estilo. Comida de buen sabor, de porciones algo reducidas, que no resalta, pero que es una opción práctica para trabajadores del sector, con un precio final de unos 11$, con entrada, plato principal, bebida y postre. La nota disonante: uno de los peores servicios que haya conocido: mesonero distraído pendiente de conversar con los amigos, me sirvió dos veces platos de otros clientes y me dio, de forma errada, lo que había disponible en el menú.

• 
• 
•