De la misma gente de Antigua, restaurant de corta carta pero llena de sabor. Platos fuertes italo-mediterráneos, hamburguesas y sanduches. Entradas típicas internacionales y con el toque venezolano. Ensaladas y sopas. Pedí de entrada un tiradito muy bueno aunque pequeño y unos tequeños muy ricos. De ppal pedimos unos pappardelles en pimienta negra con pollo (algo "pichirres con la proteína") y unos fettuccine a la crema con camarones (estos si con muchos camarones). Buenas porciones, pasta cocida a la perfección y con muy buena sazón.