Entre todos los locales de tipo Heladería-Pasteleria este definitivamente es uno de mis favoritos, el único defecto es que no cuenta con estacionamiento propio si no que tienes que estacionarte en la acera de las calles subyacentes. Posee una variedad respetable de helados, y si lo ordenas en conjunto de una banana split o de una copa, sirven de manera generosa, acompañado de bastante crema chantilly, con un precio acorde y accesible. Tuve la oportunidad de probar el Wrap de Jamón Serrano, acompañado de melocotón y queso de cabra, definitivamente una combinación que le da vuelta constantemente al paladar; aquí te dan la opción de comerlo en forma de wrap o de una ensalada normal. Otra recomendación para los amantes del chocolate blanco es su Frapuccino Mont Blanc, y si no es lo suficiente endulzado para tu día acompañalo de una buena galleta 🍪 (recomiendo el Red Velvet), que es tipo suave y casera. Recomendado para matar cualquier antojo dulce y que no afecte mucho en el balance de la economía del bolsillo.