Para el que busca un buen café y bien preparado, no hay discusión: ¡Carbone! Los dulcitos están perfectos (el ponqué de limón es divino), no compiten con el café (que de eso se trata). Lo no tan bueno es que el lugar se llena de gente instalada tipo meeting, si fuese un lugar amplio no hay problema, pero se queda corto en espacio. Necesitamos más cafés así : )