Lo primero que tienes que saber es que hay que reservar antes de ir, que el camino para el lugar es laaargo y no muy concurrido, la via para llegar un poco deteriorada..En cuanto a la atencion, maravillosa, la misma dueña nos atendió, sin tener reservacion nos permitió quedarnos. La comida, divina, aunque tengo mis reservas con el pulpo porque era grillado y no estaba tan cocido pero en realidad es cuestion de gustos. El ceviche mixto divino, la fosforera tambien...recomiendo pedir un plato para compartir puesto que a pesar de que nos advirtieron, teniamos tanta hambre que decidimos pedir de mas y los precios no son tan accesibles como para pedir de esa forma..Por persona fueron 40$ con alcohol

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