Un sitio demasiado caro para la cantidad y la calidad de la comida que ofrecen. Las raciones se vuelven súper pequeñas cuando vas con un grupo de más de 5 personas. El servicio estuvo bien en cuanto al descorche de la botella, pero se vuelve nada extraordinario cuando algunos mesoneros te retiran los platos de entrada sin haberlos terminado. Lamentablemente, el esfuerzo no vale la pena en cuanto a calidad-costo.