Lamentablemente se dañó este lugar. Era icono de la comida Peruana en la ciudad de Caracas. Ya está lejos de los sabores de costumbre. La frescura del pescado deja mucho que desear. No es ni la sombra de lo que solía ser. El postre malo y súper costoso. No vale la pena. Es una lástima, ya que era uno de mis preferidos en este tipo de comida pero no lo puedo recomendar.