Restaurante de ambiente español, hay musica en vivo y se arman unos jaleos con musica dirigida a su clientela (La Billos y Melódicos). La carta es variada pero con pocas opciones españolas ( paella, Fideuá, asopado... lo básico) pedimos medallones de pollo a la mostaza y miel y atún al ajillo y ambos frescos, sin mayores pretensiones. Lugar perfecto para unas birras después de la oficina o comer de pasada.