Estaba muy emocionada por conocer este lugar. Es un lugar hermoso con un excelente ambiente. La decepción comenzó cuando pedí la carta, nos indicaron que no tenían carta de comida 🤷🏽‍♀️ El mesonero nos comentó algunas de las entradas y platos que tenían, al pedirle recomendaciones no supo decirnos ninguna. Decidimos pedir un ceviche tradicional de entrada mientras pensábamos qué otras entradas y platos pedir... El mesonero se devuelve para indicarnos unos precios totalmente distintos a los que nos había comentado al principio. Ok, ni modo, continué con el plan del ceviche para iniciar... Cuando llega el ceviche comienza a ser mayor la decepción, eran como 30 gr de proteína y todo lo demás era maíz y batatas chips. De verdad la cantidad de pescado era MÍNIMA!!! Pruebo el ceviche y me pareció que estaba HORRIBLE, el peor ceviche que he probado. Decidí no quedarme en el lugar y retirarme, pido la cuenta y fue una cantidad absurda por 2 aguas minerales y el PEOR ceviche que me he comido en mi vida. No recomiendo este lugar para nada si lo que buscas es comer. Sólo es un buen lugar para beber y disfrutar del ambiente... y aún así los tragos son exageradamente caros.

•