Una buena opción para los amantes de las "Wings" y la comida al estilo Buffalo, NY. Las recetas son bastante estandart y la calidad se mantiene. Sin embargo, la atención no va a la par y es algo deficiente. Deben cuidar las ofertas engañosas, porque promocionan una oferta de 10 alas y 8 cervezas y después alegan que no pueden marchar la porque las cervezas de la promoción no están frías. La última vez que los visité, de la carta de tragos que tiene una amplia variedad de cocteles, solo tenían uno disponible. Y estos detalles son también importantes porque la bebida es un complemento muy importante. Los precios también son algo altos teniendo en cuenta la naturaleza de los ingredientes y que no compiten con restaurantes gourmets.

Una tradición legendaria para los amantes de la carne. Muchas opciones y buena calidad. Buena atención, ambiente grato aunque algo ruidoso. Variedad de opciones en carnes y entradas.Una barra de licores variados. La relación precio-calidad es razonable. Dificilmente saldrá decepcionado de este local.

Una opción fresca y saludable que se ha ganado la simpatía de los Caraqueños. La hamburguesa de tuna y la de salmón son ampliamente recomendables. Un menú colorido y diferente que se amolda a muchos gustos. La atención es variable, unos días muy buena y otros no tanto. Deberían estandarizar la calidad de la atención para que esté al nivel de la comida.

Un acogedor rincón de España en Chacao. Ingredientes de primera, las recetas españolas tradicionales y una excelente atención. Intimo y agradable. Una excelente opción cuando se nos antoja comer mariscos. Barra bien surtida y una amplia experiencia gastronómica

Gastronomía fusión venezolana - internacional. La atención es buena y el ambiente muy agradable. Los precios algo elevados, teniendo en cuenta que no trabajan con ingredientes exóticos sino con ingredientes típicos locales. Algunas raciones son ofensivas en relación al precio como por ejemplo las arepitas de chicharrón que son una suerte de escasas hostias tasadas a precio de Pez Globo.

Una buena opción para los amantes de las milanesas. Sin embargo los precios son algo elevados y desfasados, teniendo en cuenta que no se trata de alta cocina gourmet ni se trabaja con ingredientes exóticos. Los platos son simples pero bien elaborados. Las raciones generosas y aunque la atención no es muy esmerada tampoco es deficiente. Un local pequeño pero bien distribuido.

Una excelente opción para los amantes de la carne. Aunque la comida en general es muy buena. Respetan a cabalidad el término de cocción de la carne. Y las raciones son generosas. Una de sus mayores bondades es que no cobran el descorche. Y su caldito de bienvenida es toda una gentileza. La atención es muy buena y el ambiente agradable. Lo único que no lo hace perfecto es el ruido que hay en el área interna. Sin embargo, está la terraza como opción para los que somos sensibles a eso. La vista al Ávila es un verdadero regalo. No es de extrañar que sea tan popular entre el público caraqueño.

Un ambiente estético e impecable. Una experiencia gastronómica diferente y de muy buena elaboración. Un menú creativo con una agradable equilibrio de sabores. Porciones gourmet bastante razonables. Excelente atención en general y aunque la nota discordante fue la terrible o nula atención por parte de los parqueros.

Una suma de todo lo que no debe ser un Restaurante. Pésima atención. No tienen muchos platos, ni ingredientes de la carta. El tamal crudo, la flauta es un souvenir con sabor a aceite recalentado. El taco incómodo de comer. Y no había agua en el baño. Salí decepcionada y por supuesto, no volvería.