Un sitio muy sencillo con mesas de plásticos pero con unas cachapas ricas que valen la pena disfrutar especialmente los fines de semana. Cabe resaltar que hay que ir justo cuando abren el local o tener paciencia con la espera porque se llena muy rápido y las colas para sentarse suelen ser de al menos 40 min. Yo particularmente espero con gusto porque me encanta el lugar y el pernil que ofrecen y los batidos con yogourt. Les paso el dato que he ido entre semanas y es lo máximo porque va poca gente.
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