Mi parte favorita es que puedo combinar un plato de carne con la pasta que quiera. Una libertad que te dan pocos lugares. Los Ravioli de auyama con mantequilla con el lomito al marsala se llevan muy bien.

Aunque la idea es buena, en la práctica, las pizzas llegan frías a la mesa -se comprende luego de que pasean por 5 mesas antes de llegar a la tuya-. La masa queda muy blanca y la calidad de la mozzarela deja mucho que desear. No soy fanática de la carne mechada, el aguacate, o el plátano en las pizzas, así que les recomiendo mantenerse con los ingredientes más tradicionales. El ambiente es agradable y los meseros muy atentos... El valet parking es una gran ventaja en El Hatillo

En mi última visita nos concentramos en su menú tradicional -tienen otro de sushi-, mi ensalada de jamón serrano y mozzarella estaba rica, igual que los canelones de berenjenas -un plato pequeño-. Hubo otras pastas en la mesa que estaban pasadas de cocción y sin mucho sabor. Los postres, que por lo general son ricos, no estaban frescos y los devolvimos.

Volví después de algunas decepciones, renovaron la carta, pero conservaron sus clásicos. La atención con las bebidas estuvo algo descuidada, pero la comida a tiempo. La crema de brocoli estaba rica, la pasta reconfortante; la presentación puede mejorar.

Un sandwich relleno de milanesa (Pibe, como le dicen los argentinos) es una bella realidad en este lugar. Recomiendo el de carne. Algunas veces no tienen buen pan.

Regresé a comer hace unos días y me sorprendió porque subió nuevamente. Todos los platos estaban ricos, buena atención y económico. Pedí la crema de apio y el centro de lomito.

Sin exagerar: es el mejor café de Caracas. Siempre balanceado y bien hecho. La pastelería también es deliciosa, igual que sus tequeños y empanadas.

Son una buena opción para comer rápido y ligero. Tienen buen balance con los aderezos y son generosos con las proteínas. Sería genial que su oferta de tés fiera mejor curada -todos sabían igual- y mejor presentados -el vaso muy pequeño, llegó regándose a la mesa-

Excelente opción de comida vegetariana. El ceviche de mango que ofrecen es divino y las albóndigas de bróculi merecen una oportunidad.

Todo es de excelente calidad, siempre está fresco y sin duda, es la opción más saludable del mercado. Para almuerzos, recomiendo los rolls de quinoa o las lumpias. Cualquier jugo es divino y las bolitas proteicas de cacao son ideales para meriendas. No es un lugar económico, pero el producto lo vale.