Dios. ¡Qué bue cerdo! Vayan. El Porchetta es increíble (le caería bien un poco más de rugula). El Pulled Pork está como los dioses. Las salsas BBQ son ricas. Las papas sabrosas. Volveré por el de pollo que se veía bueno también.

Divino. Entramos por pura casualidad (el lugar al que queríamos ir estaba tan lleno que tenía gente esperando afuera) y quedé tan satisfecha que quiero regresar. El carpaccio de lomito es muy fresco y la focaccia está fabulosamente sencilla. Sabores limpios y satisfactorios. Yo me comí la ensalada Bistrot: BUENÍSIMA. Él se comió el solomo con mantequilla de hierbas, vegetales y papas. Respetan el término de la carne y todo lo demás con buena sazón.

Excelente oferta de "arma tu propia pizza". La masa ya viene precortada y dispuesta en fuentes de 3 tamaños. Tú le pones lo que quieras. Los ingredientes son de muy buena calidad y el resultado final es una pizza fresca, crocante y deliciosa. Mejor ir en una hora de poco "tráfico": tienen un horno pequeño y puede retardar un poco la expedición de los pedidos. Es una agradable experiencia y quisiera ir de nuevo pronto.

Muy buena opción de comida mexicana en Santa Mónica. Nos atendió la nueva chef, Adriana, una muchacha joven y dinámica que solo quiere ofrecer el mejor producto. Comimos los nachos, la hamburguesa rompedieta y la hamburguesa azteca. Los nachos estaban muy sabrosos. Las hamburguesas estaban buenas. Les recomiendo ese lugar y los tomates asados. Volvería a comer ahí.

Pareciera que están en proceso de reapertura tras una remodelación. Las mesas operativas son solo las que dan a la calle, el resto del restaurante no está habilitado. Tienen fallas en ingredientes (por ejemplo, no había parmesano) pero supongo que es por eso. Hacen buena masa de focaccia. Vimos mucha gente saliendo con pizzas, de a 2 y 3, por lo que es justo inferir que son buenas. Los platos principales que comimos (linguini Himalaya y pappardelle con hongos) no son nada del otro mundo.

El ambiente es agradable y seguro, pero la comida no es nada extraordinaria para el costo. Tienen vigilancia para el estacionamiento y los mesoneros son muy amables. Los deditos de mozzarella no tenían nada especial. Las escalopinas de lomito tenían buen sabor y la carne estaba bien cocida (tiene tropezones sorpresa que son bien agradables). El linguini alfredo no tenía nada de extraordinario, pero de la porción servida pueden comer 2 personas con facilidad.

La parrilla mixta y la mar y tierra son clásicos difíciles de fallar. Las papas fritas son impelables, pero también están muy ricas las empanadas de carne mechada y los tequeños de queso.

El café es suficiente, pero para desayunar también se come rico. El sándwich de queso de cabra, tomate y revoltillo está excelente. El desayuno criollo también es suculento y la arepa de pescado simplemente fenomenal.

La comida no es mala, pero tampoco me atrevo a recomendar el lugar. La atención y el ambiente le restan muchísimo a la calidad de la experiencia.

Cuando quiero algo BBB, no lo pienso dos veces y me dirijo a In Tre. Puede ser el de Los Palos Grandes o el de La Florida. Es un lugar pequeño y sin pretensiones, con comida sencilla y sustanciosa. Las pizzas son divinas, especialmente por la masa delgada y los ingredientes frescos.