Lugar que se promociona con fortaleza en brunch, pero que tiene una influencia y oferta claramente italianas. Mis expectativas fueron defraudadas: comida entre regular y simplona, que no destaca, de precios moderados y porciones considerablemente reducidas, habiendo una inconsistencia clara entre precio y porción. Lugar simple, no tan espacioso, con doble ambiente externo e interno, de ubicación algo remota. Quedo sin mayores razones para regresar.
Platos recomendados
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Precio por persona de: Entrada + Plato principal + bebida SIN ALCOHOL
Precio = Entrada + PLato principal + Bebida
Muy bonito y confortable. Tiene un espacio con aire acondicionado y una bonita terraza para pasar el rato y conversar con amigos. Los croissants están bien y el café muy bien preparado.
El lugar es muy bonito, los espacios me gustaron. La comida (probé un croissant de mermelada de frutos rojos con queso de cabra, no tenían frutos rojos trajeron con guayaba) podría mejorar, el croissant es muy pequeño y algo duro. El café es rico pero podría ser más cremoso, y el chocolate caliente está bien. Las personas son amables pero un poco despistadas, olvidaron mi croissant y hubo que ir a decirles
Me encantó! El espacio es bellísimo y la comida es divina. Fuimos a desayunar y probamos los croissant, huevos con serrano y waffles belga 10/10
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