Avila Burger (Los Palos Grandes)

No exagero si digo que es la mejor hamburgueseria de Caracas, he probado todas y esta sigue arrasando si englobamos toda la experiencia. A través de los años han sabido expandir la franquicia sin bajar la calidad (aunque esta no es constante ni uniforme todos los días ni en todas las sucursales, algo que debería cuidar la gerencia). Su carta es muy variada, todas las hamburguesas llevan el nombre de nuestro cerro capitalino. La Ávila Burger sigue siendo mi preferida, tan así que he ido unas 40 veces y jamás he pedido una distinta. En mi última visita descubrí los tequeños, de otro mundo definitivamente, totalmente recomendados. Las malteadas y bebidas son excelentes. La atención también varia dependiendo de la sucursal y del mesonero, pero siempre es atenta y rápida. Todas sus sucursales son muy agradables y acogedoras. No es barato, pero tampoco caro, se paga la calidad justa que se recibe. Recomiendo sobre todo la sucursal original de la Cuadra Gastronómica y la de Valle Arriba, y evitar las horas pico para una mejor experiencia.

A pesar de que al expandirse en varias franquicias, ha desmejorado su calidad, sigue siendo mi caballo de batalla cuando quiero una buena hamburguesa. La Avila Burger no tiene rival en Caracas, punto. Sin embargo muchos hemos notado como ya la comida no se hace con esmero, en algunas oportunidades la carne no esta en el término adecuado y apenas colocan vegetales. La atención ha decaído notablemente. Eh, pero eso si, los precios son los más altos que cualquier hamburguesería en Caracas. NO recomiendo ir a las sucursales de El Tolon, La Castellana o Valle Arriba, creo que la única que todavía se mantiene bien es la original en Los Palos Grandes. Ojalá la gerencia pueda advertir y corregir estas carencias antes de que sea muy tarde.

LAS MEJORES HAMBURGUESAS DEL UNIVERSO. Si piden la de 220 gr, con queso y tocineta en las papas y una malteada, agotaste todas las calorias de la semana. Un MUST de Caracas.

Hamburguesas sabrosas y de buena porción, precios entre estándares y ligeramente elevados. El lugar es pequeño, pero agradable y de buen entorno. La nota irregular: fui el primer cliente del día y una sola hamburguesa demoró 20 minutos. De resto, amables.

Increíble el tiempo que tuve que esperar en esta oportunidad para que me sirvieran y me dieran la cuenta. Sigue siendo mi lugar favorito para comer hamburguesas pero este tipo de situaciones convierten a los mejores restaurantes en lugares a los que no se vuelven. La hamburguesa intocable, super recomendada!