Divinos Pecados

Recibir una sonrisa, comer un rico helado, mirar y observar los lindos colores del lugar, es una invitación a saborear la infancia.

Es bonito y tiene una muy amplia variedad de sabores de helados, que aunque a simple vista se vean muy provocativos, decepcionan al probarlos. Y es que a pesar, de que son sabrosos, les falta sabor y textura, que otras heladerías de la ciudad si ofrecen.

Una heladería bastante completa, sirven variedad enorme de sabores que cambian según el día de la semana y los clásicos fijos buenísimos. Ademas sirven waffles, tortas, algodón de azúcar, chocolates y mas... La recomiendo visitar en especial con los niños q disfrutan el ambiente colorido y amigable. Un local que supera en calidad al valor de sus productos.

Parada obligatoria para los amantes del helado. Su fuerte son los diversos sabores y combinaciones. Varios plus extras como la galleta que incluyen en los helados, los sabores de fruta están hechos a base de agua, la copa un regalo de la casa. Su atencion es excelente, relación precio-valor es justa. El mayor inconveniente son los horarios, más de una vez he ido y están cerrados.

Excelente atención Les recomiendo el helado de patilla, el 'Morena Ardiente' (chocolate+tequila) y el de tomate de árbol!