Il Duomo Dei Sapori

Excelente experiencia. Solo 24 sillas y siempre full. Es obligatorio reservar, si va fin de semana sugiero reservar el mismo lunes. Típico restaurante pequeño, sencillo atendido por su propio dueño. Ingredientes de primera (parmesano, aceite oliva, etc.) que seguramente son importados por lo que imposible pedir que sea barato. Todo el menú está en italiano, cosa que nos hizo difícil entender todos los platos. Pude pedir mejor: - carpaccio de verduras: estaba muy muy bueno - arranccini: malazo, pero culpa mía por no preguntar bien. No lo sugiero - lasgana verde: buena pero sencilla - gnocchi parmesano y trufas: lo mejor del menú. Es plato obligatorio cuando vaya. - panaccotta de nutella: increíblemente buena. Obligatorio pedirla. De los platos que no pedí pero que pude ver de otras mesas destacan el pulpo grillado y el carpaccio de lomito (si, se que es algo básico pero aquí los hacen con ingredientes de primerísima calidad).

La comida es buena, el servicio es bueno pero tiene muy pocos empleados , no dan factura legal, te ofrecen algo y cuando llega la cuenta sube de precios sin notificar y te colocan en la cuenta platos de mas así que hay que revisar muy bien la cuenta por que la administración no es muy correcta que se diga. y muchas otras cosas mas. inclusive los banos están al lado de las mesas donde comes por lo tanto llegan malos olores a la mesa frecuentes. Por todo lo antes dicho no lo recomiendo.

Concepto encantador , buen ambiente excelente atención, comida deliciosa, vale la pena , una apuesta a la calidad en tiempos difíciles, lo recomiendo

Una experiencia espectacular desde la persona q te recibe hasta el parmesano que te ponen en la mesa ! Los ñoquis de queso con aroma de trufa de sueños ! El turamisu es como comértelo en Italia y la panacota de coco la mejor del mundo. Ese es el único lugar donde quiero ir a comer italiano. El mejor restaurante

Un ambiente intimo y exclusivo con cocina abierta para observar la preparación de tus platos. Pocas mesas asi que hay que reservar. La comida es exquisita, lo mejor para degustar la cocina italiana en la ciudad. No puedes dejar de pedir los ñoquis trufados.