Pincho Pan

Muy mala experiencia en este establecimiento. El servicio muy deficiente, espere un tiempo bastante largo por mesa, algo entendible por la cantidad de gente en el lugar; al estar ya ubicado en la mesa, tuve que pararme a pedir que me atendieran porque nunca llego un mesonero, lo mismo paso para ordenar. La comida no es la gran cosa. Da mucho de que hablar este lugar, y no positivamente.

La comida fue buena bastante abundante. La atención es normal ya que hay pocos mesoneros para tantas mesas pero lo logran manejar. Lo único es que el ambiente es muy ruidoso.

La comida es básica, abundante y muy adaptada, es económico y está entre comida rápida y restaurante, el lugar remodelado pierde por lo ruidoso que llega a ser, si se busca una comida buena, rápida y económica en un ambiente ruidoso está bien

Aqui la relacion costo-beneficio es evidente, recibes una comida buena, porciones generosos a un costo muy accesible. Nos gusta este lugar en esos dias donde quieres algo bueno y rapido sin gastar mucho dinero. Mantengan la calidad.

Era un cliente fijo de este establecimiento, pero cada vez me decepciono más al entrar. Primero, eliminaron el estacionamiento, por lo que para estacionar hay que hacer un curso. Segundo, los precios ya no son tan accesibles. Tercero y lo más importante para mí, eliminaron los pinchos de carne del menú, supongo que por la situación del país y tal, pero mi prioridad al ir siempre fueron esos pinchos. Cuarto, han ido descuidando los detalles poco a poco, por ejemplo, el más notorio es que hay dos tipos de pan árabe: el frito y el normal, en ocasiones recientes (las 6 últimas veces, que serán 6 meses en total), cada vez frien menos el pan (frito), por lo que termina siendo un pan duro, sin tostar y con un olor a aceite muy fuerte. En fin, se concentraron en abrir muchos locales por Caracas pero descuidando los pequeños detalles que lo hicieron famoso.