Sotano Siete (El Hatillo)

es un lugar pequeno per muy bueno, tiene buena música y abre todos los días, su dueño por lo general siempre esta allí, tiene muy buenos mojitos, lo malo es el estacionamiento, pero eso mas en todos los locales del hatillo

Me atrevería a decir que son en estos momentos son las mejores pizzas de Caracas; doradas y bien tostadas con ingredientes de primera y de increíble gusto. La carta es justa y variada tiene dos presentaciones: tradicionales y a la crema. El local es un poco incómodo y caluroso como lo dice su nombre es un sótano, y el servicio es adecuado. Recomiendo el Calzone Sótano 7, o la Diabola con chistorra picante, aunque de seguro cualquiera sea la elección no defraudará.

Ambiente agradable, mesoneros muy atentos que te explican con detalle la carta. Ideal para compartir, ambientado con house/electrónica/techno pero a un volumen que te permite conversar. El concepto de sótano se evidencia claramente; no hay ventanas, luz tenue y prevalece la luz roja del popular letrero de neon. El "Calzone Sótano Siete" es brutal. Las pizzas a la crema muy sabrosas, hay una con jamón serrano y champiñones que es muy buena. No tiene un estacionamiento claramente definido, pero no está tan lejos del estacionamiento del pueblo del Hatillo.

El local es como dice su nombre un sotano sin ventanas que ponen una musica a todo volumen imposible disfrutar ni en pareja ni en familia, sales atormentado en 5 min, las pizzas demoran horas en llegar con una masa cruda por que tienen un solo horno a medio calentar que encienden cuando llega alguien, la pizza incomible en una panaderia he comido mejores.... el precio no va con el lugar que es triste y bastante sucio en especial los baños, el olor de los baños llega hasta el comedor. La atencion fue muy mala completamente desorganizada y comimos unos primeros y luego otros despues por que el mesonero confundio los pedidos, deben contratar personal que tenga experencia aqui nadie sabe lo que hace. En estos dias para salir y pagar una pizza a precio de lomito no justifica un sitio asi, calificados cero en todo.

Las pizzas son muy buenas, la capressa estaba divina. El ambiente terrible porque colocan la música muy alta y el local es pequeño. Fui un domingo (estaba lleno el sitio) y el personal no supo cómo manejarlo, son amables pero la organización se les sale de las manos