Buen café en un ambiente bohemio, recomendados los cafés con nombres de artistas venezolanos y la torta de choco banana.

Hoy visite éste local, la experiencia fue buena en general, aunque tenía mayores expectativas. LO RESALTANTE; la torta red velvet, excelente, bien presentada, muy sabrosa y una buena porción; la atención y el servicio de su personal, principalmente del mesonero quien amable y atentamente explica los productos ofrecidos en el local. El café, bueno en general, LO REGULAR, el latte vainilla, carecía de aroma o sabor a vainilla, estaba bueno, pero era un latte normal y no lo ofertado. LO NO TAN BUENO, el dueño o gerente, chorreado sobre una silla del local en el área de los comensales, no da un buen aspecto y desluce la ambientación del local y la atención de su personal.

Grato rincón en el centro de Caracas, interesante lugar para catar cafés de método y un buen espresso. Recomendación personal el café 20/20.

Después de un poco de espera, normal para un fin de semana y más aún para un Día de las Madres, la experiencia fue excelente. Recomendación personal el sandwich de pastrami.

Excelente lugar en el centro de Caracas para tomarse un sabroso café, probar algún postre y comer un buen sandwich preparado con embutidos de la casa y sin olvidar pedir que le agreguen la mostaza también de la casa.

He estado en éste café en otras oportunidades, pero el sábado pasdo (17/06) fue una muy grata experiencia en familia. Los cafés, calientes o fríos, de muy buena factura. Además tuve la oportunidad de degustar un café extraído en V60 preprado por el propio dueño. Para los amantes y entusiastas del café es un excelente lugar.

En esta sede de la cadena, en mi opinión, lo resaltante es el café, bien preparado y servido; y como siempre las coffe cakes, son excelentes.

Coffee cakes y polvorosa de pollo excelentes. En mis visitas he sido gratamente atendido, diligente y respetuosamente, siempre con una sonrisa, lo cual en mi opinión es muy importante hoy día.

Excelente café, bien presentado y bien preparado. Local gratamente atendido. Pequeño en espacio, con una decoración ecléctica. Definitivamente un lugar para volver y probar todos los cafés que ofrecen, y más aún si vas en buena compañía para compartir la experiencia y hablar un rato.

Excelente comida; los mejores platos para mi el arroz chaufa, el chicharron (de pescado o mixto) y la causa limeña; cervezas siempre frías. Atención amena y personalizada por sus propios dueños.