Opción vegetariana completamente distinta a la que hasta ahora había probado, en cuanto a las opciones y sus sabores .... Las lumpias, las croquetas, la pasta larga con soya y vegetales, las berengenas agridulces, el tamarindo chino o el papelón con limón .... En fín, todo lo que probé estuvo muy bueno, volvería a ir sin dudas!. Es un local sencillo, limpio, de dos niveles, donde cada quien se sirve a su gusto y pagas en función del peso de la comida. Actualmente está en Bs. 7 millones el kilo. El costo de la sopa y bebida es a parte. No tiene estacionamiento propio pero puedes dejar el carro en la calle.

Para el que decida comer un sushi de feria sigue siendo una buena opción. Los precios oscilan entre los Bs. 9 millones y 20 millones sin bebida. No obstante, hay combos que cuestan entre los Bs. 10 y 15 millones e incluyen el refresco o te. Los tamaños de los roll son más pequeños, al igual que las proporciones de sus topping bien sea de camarones o cangrejo, entre otros, sin embargo todo lo que he probado hasta ahora sin salmón, está fresco y de buen sabor. La atención fué buena y el servicio rápido, lástima que últimamente no he tenido suerte en conseguir jengibre, el cual generalmente colocaban en las bandejas de sus locales sin nisiquiera preguntar. En fín consecuencias de la inflación!

Ambiente iluminado y limpio que ofrece variedad de dulces, pastas, pizzas y algunas ensaladas. Los dulces son buenos y frescos. En cuanto al pasticho venden el tradicional elaborado con pasta y salsa boloña, y el de berenjena con salsa napolitana, queso mozzarella y bechamel, ambos los consiguen en diferences presentaciones que oscilan entre los 5 millones y medio y los 21 millones. Solo he probado los dulces los cuales recomiendo y el pasticho de berenjena, de muy buen sabor pero algo seco para mi gusto. Buena atención y el estacionamiento es de apenas 4 puestos.

Excelentes cocadas, ofrecen varias opciones: la tradicional o las combinadas con brownie, oreo, susy o leche condensada, entre otras. A su vez, venden otros productos a base de coco como tortas, helados de paleta o con concha de coco, conservas, galletas, etc. El local es muy concurrido, hay que hacer 2 colas la primera para pagar y la otra para pedir. Avanzan relativamente rápido pero si hay mucho sol se hacen interminables. No hay mesas, ni toldos para compartir un rato. Todo lo que compre es para llevar. En cuanto al estacionamiento, puede hacerlo en la calle al frente del local.

Pastelería de tradición con opciones para desayunar y merendar, las tortas y los dulces son muy buenos, variados, frescos, y accesibles a pesar de la situación económica. Recomiendo probar sus tartaletas, los profiteroles, el pay de limón, los cannolis y los borrachitos. La cola de langosta era muy buena pero no la he probado recientemente. Habilitaron un espacio para comer, conversar y disfrutar de las opciones que ofrece el local. Sin embargo es bastante reducido, lo cual hace que la mayoría de las personas compren para llevar. Es una panadería bastante concurrida, por su relación precio - valor, razón por la cual hay que tener paciencia para estacionar y comprar.

Hace 4 días compre para llevar lo habitual de ese estilo. El arroz chino especial, lumpias, sopa wanton y el chop suey. Toda la comida estuvo buena, incluyendo el sabor del arroz, a pesar de no tener muchos ingredientes. El costo de la factura fue de aproximadamente Bs. 7,5 millones. Sin embargo, ya tenían disponibles unas nuevas cartas con un incremento en los precios superior al 50%, el cual sería aplicado al día siguiente. Algunos clientes las tomaban por equivocación para hacer sus pedidos y al advertirles sobre esa situación, terminaban llevando más de lo que inicialmente tenían previsto. Las salsas hay que comprarlas a parte, solo hay de 1 tamaño, y es demasiada la cantidad cuando no es mucha comida. El ambiente del local es iluminado y el servicio es rápido.

Local de muchos años, cuyas únicas opciones del menú son pizzas y pastas. Son de precios accesibles, sirven rápido y las raciones son generosas. He ido en varias oportunidades y siempre había quedado satisfecha con la relación precio/valor. Hoy pedí un pasticho de raviolis y fue un verdadero desastre, parecía que estaba comiendo una goma desabrida. Ojalá que ese plato haya sido el único que no haya tenido un buen día y no sea el nuevo punto de referencia de sus comidas en cuanto a calidad y sabor. Sin embargo, no lo recomiendo y dudo mucho que lo vuelva a pedir! En cuanto al estacionamiento, hay que tener paciencia porque es pequeño e incómodo. Lo que si es notable es la atención. Si bien no había mucha gente, los mesoneros eran muy amables y estaban pendientes de sus clientes!

Buena opción para comprar tortas, pasta seca, pasapalos de hojaldre y dulcitos. Aunque ya no ofrecen la misma variedad de dulces, siguen siendo frescos y de calidad. El de menor precio oscila en Bs. 800 mil. El estacionamiento es pequeño y posee algunas mesas y sillas en la entrada para sentarse y charlar un rato. Hay un vigilante, pero al ser un espacio abierto puede acercarse una que otra persona pidiendo comida.

Panadería que se destaca por sus pasteles de hojaldre .... Frescos y con bastante relleno. Son excelentes!. Aún no he probado los almuerzos. Tienen variedad en pasta seca y dulces cuya calidad se mantiene pero son más pequeños. El local es limpio pero ha decaído y hay que esperar para estacionar.

Restaurante con variedad de pastas y pizzas. Ambiente agradable pero algo oscuro. En cuanto a las pastas en promedio oscilan entre los 4,5 y 6 millones. La relación precio-calidad es muy buena y uno queda satisfecho con las proporciones. Sus postres no son de destacar. La atención no es mala pero hay que estar detrás de ellos para que te atiendan. Tiene estacionamiento, el 50% de su costo lo asume el restaurante y el otro 50% lo cancela el cliente a través del punto de venta.