Es una arepera de muy buena calidad. Yo nunca he inventado mucho con los platos, aunque tienen desde buñuelos de yuca hasta cartoccio de lomito. Siempre me voy por lo clásico: arepas, cachapas, chupe de pollo o hervido. Pero he probado las parrillas, el pollo a la brasa, los dedos de mozzarella y las ensaladas y me ha ido bien. La atención no es la mejor, es un lugar de mucho movimiento y no se esmeran en darte un buen servicio. Y, por la misma razón, la comida sale muy rápido.

Excelente comida china. Mantiene la misma calidad de hace años. Bastante costosa, pero digamos que las porciones son “justas” con el precio. No es que son pequeñas, pero no corresponden al precio del todo. Pedimos arroz cantonés, pollo agridulce y pollo con miel y ajonjolí. Ahhh y también lumpias, que estaban mundiales. Perfecto para reunión con amigos o grupos para pedir más variedad de platos, aunque para parejas es buena opción igual.

¡Buenísimas pizzas! De verdad que en cuanto a sabor, cantidad de ingredientes y grosor de la masa, van por encima de muchísimas otras que quizás sean más famosas. El carpaccio de lomito rico, pero un poco pequeño. El ambiente es para ir con amigos, es ruidoso. Muy buenas porciones y precios costosos, pero se justifican por la excelente calidad. Las cervezas heladas.

Este lugar se reivindicó conmigo en algunos aspectos. Las entradas estuvieron buenas. Pero aún así me pasa algo con los rolls, porque no me terminan de conquistar. Debe haber un tema con la combinación de sabores porque nunca me parecen los más ricos que me he comido. La atención impecable, el ambiente es para pasar hoooras hablando. Hay variedad de precios, así que puedes ir a comer, gastar moderado y comer igual de rico. Insisto, he probado mejores lugares, pero el ambiente le da un plus significativo.

Buen lugar para ir con amigos. Los nachos buenísimos, las flautas y las quesadillas también, pero los burritos tienen mucho arroz. Venden cervezas y margaritas divinas (solo hay que pedir que el vaso no tenga sal, sino llegan saladísimas). La atención impecable, son 4 chamas súper pendientes de todo. Muy buenos precios y buenas porciones.

El ambiente es tanto para quedarse un rato hablando, pedir algo para tomar, y picar algunas entradas, como para desayunar (sábados, domingos y feriados), almorzar o cenar. Ya sea rápido o en alguna ocasión especial. Tienen buenas porciones y buenísimos precios. Las empanaditas de queso ahumado vienen pichirreadísimas, pero las de asado negro sí están bien.

Solo he ido por el 2x1 en pizzas, que son para llevar. Son bastante buenas y de tamaño más grandes que una individual. Buen sabor e ingredientes. Si se escoge bien, vale la pena el 2x1, pero hay unas muy costosas que terminan saliendo como en cualquier otro lugar.

Es un must en Caracas. Comida mediterránea divina. Tartar de atún, ensaladas, carpaccio, pastas, risottos, pizzas, carne, pollo, pescado, mariscos y una variedad increíble de ingredientes que hacen únicos los platos. Los grissini de entrada son un vicio y te llevan (sin costo adicional) todas las veces que pidas. Los precios son bajos para la calidad que tienen.

Este sí es, literalmente, el mejor sushi de Caracas. No tiene comparación ni con el restaurante más famoso o costoso. Los ingredientes son los más frescos. Las porciones son más de lo que uno espera. Y aunque parezca costoso, cuando sacas la cuenta de la calidad, la cantidad y la presentación, entiendes que vale la pena. Es impecable.

Muy buenos sabores. Es de los pocos que quedan que cuentan con los ingredientes que hay en el menú. Las hamburguesas tienen sabores particulares cada una, todas tienen algo especial. Incluso la Vero Gómez, que podría verse insípida o “muy sana”, es divina, y con chips de batata, mejor. Los precios razonables, el ambiente chévere, y la atención normal, nada excepcional.