Alto

No suelo valorar cantidad sobre calidad pero en este caso es absurdo, las raciones son demasiado pequeñas aunque eso no le quita el hecho de tener sabores impresionantes, una experiencia única, a pesar de eso no es un sitio al que frecuentaría, volvería solo por el postre. La carta tiene poca variedad aunque sus platos son muy creativos. El precio es excesivo para los ingredientes y lo que ofrecen.

Almenos una vez en la vida este sitio merece la pena ir, pues ademas de la buena comida, es sinónimo que aquí tenemos la representación de la alta gastronomía. Vale la pena

exquisito! entrada ceviche de parchita espectacular, plato principal Reaby madurado perfecto sabor y textura co papas colombianas y de postre un suflé del más allá con cacao venezolano y helado de vainilla. atención muy distinguida, sin desperdicio

Muy bueno para ocasiones especiales, comida de gastronomía alta, logran hacer comida criolla en forma muy especial.

De los mejores Restaurantes que hay en Caracas... Definitivamente un lugar al que hay que ir por lo menos una vez al año