Come a Casa

Bueno, bonito y "barato". Sencilla pero sólida propuesta italiana-siciliana muy bien localizada. Carta mayormente de pastas y risottos, faltan carnes. No recomiendo los gnochis de zuppa pero si los linguinis con salsa de queso de cabra y la panacotta. El pan de la entrada estaba viejo. El servicio fue atento y amable, le faltó rapidez con el café, que tardó más que el plato principal. El ambiente es acogedor y simple, con una terraza simpática. Volvería.

Es la peor atención que he recibido, las personas que atienden son mal educadas y falta de cortesía, no respetan a los clientes ni a la familia ni a los niños. No le permiten al cliente elegir, si desea comer solo postre. Si llega antes de la hora de la apertura, aunque ellos se encuentran ahí y usted esté sentado, no le toman la orden hasta la hora de la apertura. En conclusión la peor atención de Caracas.

Agradable espacio donde puedes conversar tranquilamente, la comida con sabores delicados y bien presentes que hacen de cada bocado una agradable sensación. Atención adecuada, cuando los necesitas están allí para atenderte.

Es un ambiente agradable y cordial. La decoración sencilla, las vajillas y la presentación de los platos te hacen recordar que realmente estas "comiendo en tu casa". La calidad y el sabor de cada plato es su sello. Los postres y el café son deliciosos. Cien por ciento recomendado!

El ambiente es completamente encantador. El menú juega mucho con los mismos elementos, sin embargo son muy buenas las combinaciones cuando se prueban. Los mesoneros atentos.