L'Osteria Caracas

¡Fue un muy agradable descubrimiento! Estábamos por la zona el sábado en la noche y todos los sitios estaban full o la cocina cerrada a la 9:00pm (si es insólito que aún hayan sitios que cierren un sábado a esa hora), pasamos por el frente y nos gustó su pared turquesa, preguntamos y nos dicen que la cocina está abierta y hay disponibilidad. Pues les cuento algo, entramos y apenas había dos mesas ocupadas, todo lo demás vacío (mal vaticinio) esta gente está haciendo algo mal, porque la comida es excelente, los precios son muy honestos, la atención muy buena, lindo diseño y decoración. La carbonara hecha como debe ser SIN LECHE y es una de las mejores que he probado, hay varias pastas clásicas y entre ellas un ragú genovese FANTÁSTICO. No entiendo como no estaba a tope. Lo repetiré

En esta oportunidad probé el nuevo menú ejecutivo. Me encontré con comida de buena sabor, porciones justas y variedad moderada de opciones para configurar el menú, lo cual lo hace una opción interesante para ejecutivos y trabajadores del sector que quieren una comida con nivel adecuado y rápida. El lugar es sencillo, con cierto aire rústico, ubicación tranquila y segura. El servicio mejoró desde la última vez que vine, pero continúa la mala práctica del cobro compulsivo del servicio, además de que no se incluye impuesto, lo que termina inflando la cuenta más allá de lo previsto.

bien ubicado en los palos grandes , pero el sitio tiene ambiente de cafetería muy informal , comida casera muy buena , nada extraordinario. Ojo los precios hay que sumarle 16% y 10% servicio que viene al final en la cuenta

Establecimiento de comida italiana, que da sus primeros pasos, con una decoración campestre y capacidad para unas 50 personas, entre dos ambientes: uno interno y otro externo más agradable en horario nocturno. En esta oportunidad probé una de sus pizzas, la cual conseguí de estilo napolitano, buen sabor, masa agradable semi crujiente y de porción reducida, que deja con hambre a quien llega con gran apetito. En general, pizzas con precios iguales a la competencia, pero más pequeñas y sin algún elemento diferenciador. El punto discordante: el punto de venta rebota muchas tarjetas internacionales, generando una situación incómoda para el cliente, por lo que se recomienda tener múltiples opciones de pago a la mano. De la misma forma, restaurante que ejerce la muy mala práctica del cobro compulsivo del servicio, lo cual pedí que me fuera retirado de la cuenta, porque, además de no ser correcto, tuve que perder mucho tiempo, porque varias tarjetas rebotan en su punto, poniendo en aprietos al cliente.