Personalmente he ido a degustar tanto desayunos, como almuerzos y postres. Mi desayuno favorito es el mini lunch con pollo y queso amarillo, me enamoró desde que lo probé la primera vez y los batidos de jugos son espesos, con poca azúcar, realmente exquisitos. Las hamburguesas son muy buenas, sabores nuevos y para ir acompañados y probar varios. Fui con la promoción de octubre, donde la temática es de "La Casa de Papel", la hamburguesa tenía un tamaño normal, que llena a una persona de buen apetito. Probé la Palermo que era con pan tequeñon y quedamos simplemente enamorados y también la Tokio que era con chopsuey, pollo teriyaki y lumpias en lugar de papas fritas, ésta última estuvo buena pero luego de la Palermo, era muy difícil llegarle a las expectativas que teníamos. De postre nos comimos un brownie que fue la gloria, tiene diferentes toppings y lo que más nos gustó es que la barra de chocolate que le colocaron arriba no era dura, sino cremosa, lo que hizo estupendo la parte sensorial del postre. Cosas a mejorar: El ambiente es muy cerrado y el ruido de fondo aturde, la voz de todos los comensales más las personas en la cocina, no permiten que fluya comunicación en las mesas. Al estar ubicado en plena Av. Casanova, recomiendo estacionar en el CC El Recreo y caminar hasta el sitio (no es lejos) o dejar aparcado el carro en la calle si tienes suerte de conseguir puesto. Los precios no son accesibles, a pesar de su ubicación el local está diseñado para una clientela de buena situación económica, así que recomiendo aprovechar cualquier promoción que tengan para probar el menú.
